HOPE DIAMOND: ¿LEYENDA O REALIDAD? (III)

Hope Diamond en el museo de Harry Winston

HOPE DIAMOND: ¿LEYENDA O REALIDAD? (III)

Continuamos la historia de uno de los diamantes más afamados del mundo, con la última parte de su oscura leyenda.

Tras pertenecer al griego Simón Montarides, el diamante pasó a ser del rey de Turquía, que, se lo regaló a su esposa, Subaya Hamid. Pocos días después, ella fue asesinada a manos de su marido; sin embargo, el no corrió mejor suerte, ya que perdió el trono y acabó encarcelado hasta sus últimos días. Tras estos acontecimientos, el diamante desapareció en el océano, reapareciendo tras largos años de su búsqueda en una bóveda de un banco francés, que quebró inexplicablemente. Fue en esta entidad bancaria donde lo adquirió el director del Washington Post, cuya esposa contrajo una grave enfermedad que la llevó a la muerte, mientras que su hijo falleció bajo las ruedas de un carruaje.

En 1910, el propietario de la joya era el joyero P. Cartier, que decide venderla a la familia McLean, sobre la que cayeron múltiples desgracias. Uno de los hijos, de ocho años de edad, murió atropellado. Una de las hijas falleció por sobredosis de somníferos, mientras que su padre muere en un psiquiátrico en el que estaba interno por sufrir una grave depresión; y así fueron muriendo prácticamente todos los miembros de esta familia…

Evalyn Walsh McLean con el Hope Diamond

En 1949, Harry Winston, un joyero estadounidense experto en diamantes, compró el Hope Diamond, lo pulió realizando algunos cortes geométricos para aumentar su brillo, y lo expuso en diferentes museos e institutos de EEUU. Ese mismo año, lo donó al Museo Nacional de Historia Natural de Washington. El museo tardó algún tiempo en aceptarlo por temor a que trajera la maldición a la ciudad.

La mujer de Harry Winston presenta el Hope Diamond en el Museo Nacional de Historia Natural de Washington

Finalmente, el museo aceptó la exposición de la joya, y sus visitas se duplicaron de un día para otro,convirtiéndose en el objeto más visitado del mundo después de la Mona LisaPor lo visto, el cartero que llevó el diamante al museo fue atropellado, su mujer falleció de un infarto al conocer la noticia de la muerte de su marido, su casa se quemó y su perro murió asfixiado.

Actualmente, el Hope Diamond se encuentra expuesto en el pabellón Harry Winston, donde es admirado por unas siete millones de personas al año.

El Hope Diamond ha sido una gran fuente de inspiración para creativos, empresarios, guionistas, etc. Podemos ver esta gran joya en películas, series, muñecas… ¡todo un tesoro!

Hope Diamond ha inspirado a grandes películas como la de Titanic

La Cerdita Peggy y el Hope Diamond

Hope Diamond Barbie

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